Testimonio de una llama-alma gemela: "Mi llama-alma gemela no es perfecta ni es maravillosa" (ya publicado aqui en el blog)

 

"Recuerda que hay un propósito mucho mayor que ustedes dos para eso que has estado viviendo.

¡Reconéctate con ese propósito!" 

 

 

 

Testimonio de una Llama-Alma Gemela: "Mi llama-alma gemela no es ni perfecta ni maravillosa"

 

"Nos gusta pensar que nuestra AG es maravillosa, perfecta, libre de defectos, que aparecerá y será una persona maravillosa y seremos felices para siempre. Creo que sí hay algunos casos así, pero también hay otros que no. Cuando conocí a mi AG me pareció el hombre perfecto.. pero la ilusión duró apenas unos días. Pronto descubrí muchas heridas y comportamientos que no eran los esperados.

 

Algunas veces he leído comentarios tipo “Si te trata mal no es tu AG”, pero no siempre es así. Siempre digo que en la espiritualidad no suele haber patrones cerrados. Mi AG se portó humanamente no demasiado bien conmigo, me fue engañó, me habló mal.. ¿Y qué pasa si tu AG te maltrata psicológicamente, o si te miente?.. ¿Qué hacer cuando los hechos contradicen todo lo que para ti era correcto? ¿Perdonas, o es acaso hacerlo una forma de sumisión y degradación hacia ti misma? Es un tema muy delicado, para mí misma no ha sido nada fácil encontrar la forma de manejar esta situación.

 

Debemos comprender que algunas AG hemos venido a limpiar karmas colectivos y familiares, algunos venimos con karmas duros que implican grandes aprendizajes, pero no sólo para el que en apariencia tiene “el gran defecto”, el aprendizaje de la otra parte es igual de complicado y suele haber "otros defectos" en contrapartida. Aunque es más fácil pensar que él debe sanar más, el trabajo es para ambos.

 

Es muy fácil amar incondicionalmente a una persona “perfecta”, pero aprender a amar a alguien que te hace daño o que tiene un comportamiento inadecuado implica una gran humildad, un análisis profundo de ti misma, de tus valores, de lo que de verdad crees y sientes y eso se convierte en un proceso para conocer tu verdadera grandeza.

 

No se trata de ser una víctima en manos de nadie, ni ser sumisa, se trata de un ejercicio gigante de humildad, de comprensión, de mantenerse a distancia si es necesario, pero de tener compasión. No es fácil llegar de verdad y de forma sincera a un punto en el que la compasión es más grande que el victimismo o la autodefensa. Por que él vino con una gran tarea, pero yo también. Y somos un equipo. Hace poco una persona me hizo un comentario sobre el baile de pareja profesional que viene muy bien como ejemplo, mi amigo me dijo: “Cuando ella se equivoca, yo siempre digo ´nos hemos equivocado´, por que somos una pareja, los fallos aunque los cometa uno, son de los dos, no se me ocurriría echarle la culpa a ella”. Sabias palabras.

 

A mí AG le tengo compasión en su parte humana por que sé lo difícil que es para él llevar esta carga que no sabe soltar, y siento una gran admiración por su alma, por que eligió estas circunstancias para superarlas, para limpiar una parte de karma colectivo masculino. Y quizá de momento no lo consiguió del todo, pero el haberlo intentado, el haber querido hacerlo, es un gran mérito.

 

Y la otra parte, en este caso la mía, también es una gran toma de consciencia. Pasé por todas las fases, los lloros, el victimismo, la rabia, la impotencia, el echarle la culpa a él como si yo lo hiciera todo bien.. Pero si de verdad llegas a amar a esa persona que sientes que te hace daño, si de verdad abres ese canal inmenso de amor que todos llevamos de serie aunque no lo sepamos, la energía y el amor que irradiamos es inmensa.. quizá incluso más que si todo hubiera sido fácil, por que lo hacemos conscientemente.. a veces para valorar las cosas debemos luchar por ellas..

 

 No sé si yo lo he logrado, lo intento, pero con toda la humildad de la que soy capaz asumo que soy humana y que a veces tengo malos momentos. Pero no desfallezco, cuando pasa vuelvo a levantar la cabeza y a entregarme a ese amor, y el intento es tan bello.. El dejar de sentirme víctima y centrarme en mi consciencia, en ofrecerle a él y al universo mi amor, sin que eso signifique humillarme ante él o permitir conductas dañinas para mí, sin que signifique tratar de convencerlo de nada, sabiendo ponerme en mi lugar con firmeza y ternura. Ofreciéndole mi mano cuando desfallece y se siente perdido, aunque él no lo haga conmigo. Eso es lo que trato de conseguir, y este es uno de los aprendizajes que venimos a superar las AG conscientes..

Tomado de “Almas Gemelas misión de amor” Facebook 

 

 

Sirena Corazón

Blog "Almas Gemelas que se Unen"

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